Un emprendedor es una persona que identifica una oportunidad de negocio y decide reunir los recursos necesarios para ponerla en marcha. Sus características más comunes son la creatividad, organización y flexibilidad. Pero esto varía según los diferentes tipos de emprendedores. A continuación, te definimos los perfiles existentes.
Tipos de emprendedores
Emprendedor visionario
Se caracteriza por ser capaz de realizar diferentes tareas a la vez y hacerlas todas bien. Siempre está buscando oportunidades de negocio y se adelanta a las tendencias del momento. Son versátiles y les gusta probar en cualquier entorno. El emprendedor visionario es una persona vocacional y pasional lo que le proporciona buenos dotes de comunicación y de persuasión.
Su punto débil se da por sus ganas de buscar objetivos continuamente. No cierra nunca una estructura ya que abre puertas a nuevas oportunidades constantemente.
Por ello, si estas detrás de este perfil, trata de adquirir constancia y no cambiar de proyecto hasta que tengas uno finalizado. Si lo quieres hacer, trata de encontrar las razones de tu cambio de opinión y una justificación.
Emprendedor por necesidad
Si eres de los que se ven obligados a identificar oportunidades de negocio en el entorno por las circunstancias, eres un emprendedor por necesidad. La subsistencia de tu empresa depende de las posibilidades que existan en el mercado.
Este tipo de emprendedor nace por su insatisfacción con su situación profesional o económica por lo que deciden buscar un nuevo rumbo. Son cautelosos a la hora de emprender y suelen hacerlo con proyectos pequeños.
Para ellos es muy importante el valor del esfuerzo individual y el papel del trabajo en el desarrollo humano y económico.
El emprendedor por necesidad tiene dificultades para establecer su meta ya que es la actividad emprendedora quien les elige a ellos y no al contrario, por ello deben poner énfasis en desarrollar una personalidad empresarial. También tienen que especializarse en su sector y aprender a definir su nicho para no depender de los vaivenes del mercado.
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Emprendedor inversor
Es el que posee un capital y decide crear una empresa. Su principal objetivo es la búsqueda de rentabilidad y oportunidades en cualquier circunstancia. Esto es lo que hace que siempre este evitando la incertidumbre lo cual provoca que muchas veces decida frenar algún proyecto.
El riesgo e implicación del papel que juegan en el mundo empresarial suele ser de asesoramiento y aportación de capital.
El problema viene cuando solo se centran en producir dinero. Esto no les estimula lo suficiente a continuar con un proyecto si este pasa por un bache.
Emprendedor en busca de oportunidades
Pone bastante ímpetu en analizar el mercado y buscar qué necesidades están sin cubrir. Su mente analítica y racional le permite detectar dónde debe actuar y percibir los pequeños detalles para sacar conclusiones a las que nadie antes había llegado.
El emprendedor en busca de oportunidades posee una versatilidad que le otorga capacidad de afrontar diversas disciplinas y estar presentes en distintos sectores.
Su capacidad analítica puede provocar en ellos ser empresarios con falta de comunicación o don de gentes. Por ello de vez en cuando deben dejarse llevar por la pasión y la intuición en algún proyecto.
Emprendedor por azar
La figura de este emprendedor nace por casualidad o accidente. Un amigo o familiar les propuso en su día crear un nuevo negocio y aceptaron.
El emprendedor por azar es una persona decidida, dispuesta a tomar riesgos y con alta capacidad para adaptarse a los posibles cambios. Suelen surgir en mercados de crecimiento y poco efectivos.
Su punto débil lo marca la falta de implicación debido a que han llegado donde están por casualidad y no por deseo. Por ello, aunque el azar le ha brindado una oportunidad deben racionalizar en el proceso empresarial.
Emprendedor persuasivo
Es conocido por ser una persona de prestigio, ideas innovadoras y una fe irrompible en sí mismos y sus proyectos. Cuando tienen una idea, creen en ella y consiguen transmitir la pasión en sus productos o servicios a las personas de su alrededor.
Su marca personal está tan bien elaborada que en muchas ocasiones los compradores siguen más al emprendedor que al propio producto.
Su perseverancia y creencia en sí mismos a veces les juega una mala pasada no dejándose aconsejar por otras personas.
Si ya sabes qué tipo de emprendedor eres, lo siguiente es contratar una tarifa para empresas para que tu negocio disfrute del mejor servicio de comunicación. Si necesitas más información, no dudes en llamarnos al 1496 o consulta nuestra web.
Y tú, ¿con qué tipo de emprendedor te identificas?
