Durante este último año, son muchos los autónomos que han pasado decidido entrar en el mundo digital. Para gran parte de los que han tomado esta decisión, el resultado ha sido un éxito que les ha ayudado a superar la crisis provocada por la pandemia. A pesar de ellos, no todos han conseguido estos resultados con su web, y esto se debe a la contaminación visual.
Esto se debe a que muchos de estos autónomos han vivido un proceso tan veloz, que no han tenido el tiempo necesario para poder adaptarse, sino que han aprendido sobre la marcha.
La mayor parte ni siquiera contaba con una página web cuando la pandemia dio comienzo a finales del primer trimestre del pasado año, pero a día de hoy todas sus ventas se realizan a través de su página.
por supuesto, esta falta de aprendizaje les ha pasado factura a más de uno, pero es algo que se puede solucionar.
Por este motivo, igual que te hemos hablado de las normas ISO, queremos explicarte qué es la contaminación visual y cómo puedes evitarla en tu negocio
El problema de la contaminación visual
Al crear una nueva web para poder vender productos o servicios, a lo que se le da más importancia desde un principio es su estética, de forma que sea capaz de captar la atención de otros usuarios y que estos compren.
El error cometido por muchos es poner una gran cantidad de productos con el fin de que sí o sí, los usuarios quieran llevarse uno o más productos, pero lo más habitual al hacer esto es conseguir el resultado contrario.
Esto es lo que se conoce como contaminación visual. Cuando entras a una página web y esta se ve saturada de información, por lo que no tenemos clara cómo procesarla.
A primera vista se aprecian multitud de datos de diferentes productos, letras de diferentes tamaños, muchas fotos, colores de toda clase y demás ocurrencias.
Esto provoca en los usuarios la incapacidad de poner la atención en algo en particular, y debido a ello este prefiere salir de la página web para buscar otra más sencilla donde tener la información y productos que quieren más claros.
Teniendo esto en cuenta, es evidente que es necesario procurar evitar la contaminación visual, ya que puede ser la causante de que una web no tenga muchas visitas y las compras no sean muchos.
Mejora la experiencia del consumidor
Cuando creas tu propia página web para vender productos o servicios, debes pensar que estás montando una tienda física.
En un establecimiento así, lo habitual es poner más a la vista los productos más llamativos y organizar el resto con lógica, de forma que sea fácil encontrar lo que uno busca en la web, ya que en una tienda no pondrías productos en medio de los pasillos molestando al paso.
A la hora de montar tu página web debes tener la misma mentalidad, poniendo todo de forma que los usuarios verdaderamente queden atrapados con el contenido que tengas en tu tienda online, y así llegar a conseguir las ventas que buscabas.
Por supuesto, el cliente debe tener claro dónde está mirando, de dónde viene y dónde quiere ir. Más que nada porque si quiere buscar un producto en particular, como una falda, si tiene que emplear demasiado tiempo en encontrar dónde está la sección con estas prendas, ten por seguro que abandonará la página web.
Otra cosa que también te puede ayudar es la arquitectura de capas, aunque por supuesto, cuanta más variedad tengas en tu tienda online peor, ya que esto es contaminación visual y puede dificultar las búsquedas de los usuarios.
Debido a ello, es bueno trabajar con moderación y ofrecer justo la información que los usuarios necesitan sin excesos.
Recurre a la arquitectura de capaz para eliminar la contaminación visual
Es habitual encontrar contaminación visual en las tiendas, ya que son muchas las cosas que quieren poner a disposición de los usuarios. Pero como ya te indicábamos anteriormente, esto puede provocar el efecto contrario, y hacer que abandonen tu sitio web.
Es por esto que para evitar la contaminación visual, debes recurrir a la arquitectura de capas, de forma que todo tu contenido esté bien colocado.
Para lograrlo hay que basarse en el criterio de jerarquía. Lo que debes conseguir es que, cuando un usuario entre a ver un producto, enseguida tenga a su disposición la información básica de este, una buena descripción, precio y varias fotos, sin olvidar el botón de comprar, el cual debe estar bien a la vista.
Cuanto más fácil se lo pongas a tus potenciales clientes, más rápido llegarán las ventas. Lo habitual es que son la primera capa sea suficiente para tomar la decisión de compra o no, pero si tienes mucha más información que ofrecer, en tu e-commerce puedes incluir más capas.
En la segunda puedes añadir más información acerca de lo que ofrecer. También puedes incluir alternativas al producto que muestra, con tal de que si tiene dudas, tenga otras opciones para seguir mirando.
También debes incluir una tercera capa, en la cual haya comentarios y opiniones de usuarios, además de productos que es habitual comprar junto con el que el cliente mira en ese momento.
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