Lo que comenzó como un atrevimiento en el mercado tecnológico de gran consumo ahora está comenzando a llegar a las empresas como herramienta de optimización. Y es que la AR y la VR ya no son solo gafas y aplicaciones.

Tal y como refleja Statista, se prevé que la Realidad Virtual facture 16.000 millones de dólares en 2022, y la Realidad Aumentada crezca hasta los 2.800 millones para el año 2025.

Se trata de tendencias no solo explicadas por la oferta de hardware y software para el público, sino también por la adopción a nivel interno de soluciones especializadas por las empresas.

Hoy en MÁSMÓVIL Negocios ponemos la mirada en algunos de los ejemplos de AR y VR más refrescantes para emprendedores y autónomos interesados en estas tecnologías.

VR y AR en empresas

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Aplicaciones punteras

Las empresas más vanguardistas y decididas con la Transformación Digital analizan sus procesos, se alinean con las necesidades, y aplican medidas pensando en los objetivos.

Por eso resulta complicado hablar de aplicaciones o metodologías universales aplicables a cualquier organización; el sector, el contexto y la naturaleza de la organización condicionarán.

Siempre es más sencillo referirse a la VR y la AR ignorando el frente "as a service" desde tipos de tasks concretas.

"Normalmente las tareas en las que puede entrar la Realidad Virtual se dividen en dos categorías: entrenamiento y aplicación práctica", apunta el especialista Bernard Marr.

Entrenamiento

Las compañías partícipes de los ejemplos acostumbran a estar increíblemente concienciadas con la digitalización, y son conscientes de la importancia de la formación dinámica del personal.

No sorprende así que muchas estén mejorando sus procesos de aprendizaje interno con aplicaciones de Realidad Virtual capaces de mejorar cualitativamente resultados

"La Realidad Virtual ofrece la posibilidad de sumergirse en cualquier situación que pueda ser simulada en un ordenador", apunta Marr.

La realidad virtual puede permitir al trabajador de una fábrica manipular con sus manos piezas ficticias, o a un piloto de avión de una operadora entrenar los reflejos. Las aplicaciones son casi ilimitadas.

"En las empresas de fabricación y producción, la VR permite simular y probar todas las características de una pieza, un proceso o un mecanismo", puntualiza.

Hace unos pocos años Oculus supo detectar este nicho y ahora se ha convertido en un referente gracias a su tecnología VirtualSpeech, especializada en el entrenamiento para hablar en público.

"Las imágenes cada vez más fotorrealistas 'engañan' a nuestro cerebro para que crea, en mayor o menor medida, que lo que estamos viendo es real, permitiéndonos monitorizar y aprender de nuestras interacciones".

Aplicaciones prácticas

Si hay una tecnología que se ha visto enormemente alimentada por la irrupción generalizada del teletrabajo esa es la Realidad Virtual. Hablamos de la llamada Telepresencia; la capacidad de completar tareas y procesos sin estar físicamente presente en el lugar de trabajo.

Paralelamente la VR también permite a los trabajadores modelar e interactuar con simulaciones de objetos reales cuya materialización sería imposible o muy costosa para la empresa.

Es lo que ya se está destilando en el sector médico, con la experimentación de nuevas herramientas en entornos artificiales y seguros.

Además, "los fabricantes de equipos también obtienen una retroalimentación de valor incalculable gracias a la estrecha vigilancia que permite la VR", añade Marr.

Las empresas pueden así ahorrar millones de dólares en la fabricación de herramientas de trabajo sin la seguridad de que aportarán valor real a la cadena de producción.

Boeing y Airbus practican desde hace casi un lustro dicho enfoque con espacios digitales pensados para diseñar y probar piezas y modelos.

La alternativa

Los ejemplos más exitosos de integración tecnológica lo protagonizan empresas de carácter técnico. No obstante, cada vez más startups y pymes se unen a la tendencia saltando con la más accesible Realidad Aumentada.

Esta, a diferencia de la VR, no requiere de ningún hardware externo para funcionar, y puede ser empleada en cuestiones más generales. Su aplicación es tan inmediata como lo es la reorientación parcial de la empresa y los beneficios son inmediatos.

"El motivo por el que la AR es mucho más exitosa es la ubicuidad que la caracteriza", sostienen desde la proveedora Perfectial.

Su traslación al mundo empresarial, además, no requiere de ningún planteamiento nuevo. La Realidad Aumentada viene a facilitar determinadas experiencias potenciando los sentidos. Y eso resulta muy práctico en tareas manufactureras.

Ejemplos reales y prácticos

Formar, anticipar, reforzar debilidades. Las aplicaciones prácticas de la RA y la RV difieren en forma, pero no en forma.

El denominador común siempre es la generación de valor. El respeto por el proceso y su consolidación a través de una tecnología que lima asperezas sin trastocar la cultura corporativa de la compañía.

Walmart

En 2017 la famosa cadena de supermercados estadounidense decidió prepararse para un evento comercial crítico con Realidad Virtual. El reto pasaba por formar al personal para el famoso Black Friday.

Para ello recurrieron a Strivr, un servicio con el que pudieron recrear el entorno de la cita (largas colas, multitudes, descontrol) para dotar a los trabajadores de capacidades que de otra forma no hubiera sido posible transmitir.

¿Qué se puede aprender de esto? La RV y la RA no solo son tecnologías de largo alcance. Un reto concreto puede ser afrontado con ellas, y ni siquiera es necesario poseer experiencia. Basta con recurrir a una empresa externa.

Aecom

La telepresencia cruzada con el entrenamiento. La Realidad Virtual y la Realidad Aumentada son cada vez más comunes en el sector de la arquitectura gracias a su potencial en una actividad rodeada de grandes riesgos.

Para reducirlos, la firma angelina Aecom decidió emplear tecnología AR de cara a permitir que sus arquitectos e ingenieros de todo el mundo pudieran visualizar modelos de grandes proyectos, en busca de potenciales fallas.

En este caso es Microsoft HoloLens lo que está abriendo las puertas a unas operaciones globalizadas que huyen del presencialismo para superar un reto antagónico en el sector. Y eso es justo lo que se puede aprender de la empresa.

El miedo que caracteriza a las empresas manufactureras cuando realizan importantes inversiones se puede combatir testando las ideas y los productos antes de fabricarlos.

El temor que tienen muchas organizaciones frente al teletrabajo se puede apaciguar rompiendo distancias para resolver reuniones o proyectos complejos.

Amazon

El gigante del e-commerce maneja toneladas de datos cada día, y sí, también palidece a la hora de analizarlos.

Tal y como coinciden todos los expertos, el gran reto de la Inteligencia Artificial y el Big Data en los próximos años no será la demanda de datos, sino su procesamiento.

Es, de hecho, este el que marca el ritmo de las evoluciones. Y en dicha empresa puede participar la Realidad Aumentada. Así lo consideró Amazon a la hora de establecer un acuerdo con el fabricante de cascos virtuales Vuzix.

El contrato comprendía la creación de una sinergia entre AWS IoT Analytics y las gafas M300 para consolidar una herramienta capaz de capturar, analizar y distribuir datos prácticos en tiempo real a los trabajadores en sus propios puestos.

"El sistema permitirá a los empleados explorar almacenes, gestionar inventarios u ofrecer asistencia remota a la construcción de un centro o una planta, informados por los datos recolectados por la Inteligencia Artificial", exponía la fabricante.

¿Qué se puede aprende de este caso? Aunque en el sector ya existen multitud de empresas especializadas, las interesadas también pueden tomar partido en la implementación de la AR y la VR.

Identificar las necesidades propias y tratar de coordinarlas con los productos y servicios de proveedores es la clave para alcanzar una ventaja competitiva real en cualquier mercado.

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Y tú, ¿ya estás al día de la vanguardia en AR y VR?