El término brecha digital se refiere a la diferencia entre quienes no tienen acceso a conocimientos relacionados con las nuevas tecnologías y quienes sí. Con la llegada de las TIC se creía que paulatinamente se corregiría este problema que afecta a empresas, sectores sociales, colectivos y países. Pero estas desigualdades no solo persisten sino que se acrecientan.

Hoy en día, la tecnología es una herramienta para el desarrollo y el progreso social, y también es crucial en nuestras vidas: en la medicina, la educación, el entretenimiento... A veces la adaptación a la tecnología es más evidente, como el paso a la TDT, y a veces es más sutil. Por ejemplo el hecho de acostumbrarnos a operar con apps, ya que el smartphone está más integrado en nuestra rutina.

Sin embargo, hay elementos que en un mundo globalizado se consideran imprescindibles como la conexión a Internet, algo que ni mucho menos está presente en todo el planeta. Según World Stats, en África menos del 40% de sus habitantes tienen conexión a Internet, frente al casi 90% de los europeos.

En el grupo MÁSMÓVIL ponemos nuestro granito de arena para reducir esta brecha, gracias a nuestro firme compromiso de garantizar la conectividad de calidad de todos.

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¿Cómo afecta la brecha digital a las empresas?

Las variables de cómo puede afectar la brecha digital a las empresas pueden ser casi infinitas. Podemos aterrizar el problema a nivel local pero obviamente muchas oportunidades se perderán cuando tenemos un negocio con miras de crecer y ser más global.

En primer lugar, la brecha digital hace que la competencia entre las empresas no sea justa. Un negocio de una zona rural que podría tener una tienda online pero no la tiene porque la conexión en la zona no lo hace posible es uno de los muchos ejemplos que nos podemos encontrar.

A nivel global

A gran escala es algo que ocurre con empresas de diferentes países, ya que las menos digitalizadas tienen menos oportunidades de salir a competir al mercado internacional.

Sin ir más lejos, las plataformas y herramientas de comunicación que encontramos en una empresa digitalizada no son comparables a una que se ha quedado atrás. Incluso las oportunidades de empleabilidad son menores y las empresas pierden la oportunidad de captar talento venga de donde venga.

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Frena la innovación

Las empresas que sufren la brecha digital no suelen optar a los mismos avances en innovación y su toma de decisiones no está basada en estrategias previas mediante procesos automatizados o la cada vez más presente IA. Estos son algunos de los ejemplos que ponen de manifiesto que la brecha digital no solo hace perder ventajas y oportunidades.

La brecha digital es un grave problema que genera importantes disparidades sociales. Además, a medida que la sociedad se vuelve más digital e interconectada, se hace más evidente el problema. En este contexto, es imperativo asegurar que las capacidades digitales y las herramientas TIC básicas se conviertan en recursos que todos en cualquier país tengan acceso.

Un compromiso a largo plazo

Parte de la solución está en el compromiso de países y empresas por llevar herramientas TIC a países con importantes brechas tecnológicas, pero las oportunidades de negocio y la rentabilidad de estas iniciativas siguen siendo controvertidas.

Y es que aunque ha habido propuestas de este tipo, el debate está abierto torno al posible negocio y lucro en esas iniciativas. Sin embargo, si algo está claro es que los resultados de una educación digital son visibles a largo plazo dentro de una sociedad.

Ahora que ya sabes algo más sobre la brecha digital, solo necesitas asegurarte de que dispones de la mejor conexión en tu empresa. En MÁSMÓVIL Negocios te proporcionamos los mejores servicios de telecomunicaciones para que estés siempre conectado con tus proveedores y clientes. Visita nuestra web o llámanos gratis al 1495 y te informaremos sin compromiso.

Y tú, ¿has vivido en primera persona la brecha digital?