El aumento de la productividad se puede alcanzar de muchas maneras. En MÁSMÓVIL Negocios ya os hemos hablado de las ventajas que ofrece la música, una buena iluminación, o incluso el uso del humor en este sentido. Hoy, aprovechando el Día Europeo de la meditación, traemos a colación una práctica que se está extendiendo cada vez más por empresas de todo el mundo.

El minduflness es uno de los pocos términos de nueva cuña que tiene usos realmente prácticos en la oficina. La también llamada "atención plena" viene acompañada de una serie de ventajas que se han adaptado al contexto digital y de máximo estrés mental actual. Pero meditar, la milenaria técnica de relajación, arrastra otros beneficios más puros y lógicos.

¿Sabes ya cómo practicar la meditación en el trabajo durante la jornada laboral? Te puedes evadir mentalmente mientras trabajas, y es más sencillo de lo que parece.

Meditación en el trabajo

También te puede interesar: "Las mejores técnicas de mindfulness para empresas"

 

Descarta parafernalias preconcebidas

El mundo cultural ha adaptado de forma libre prácticas religiosas, y todo ello ha intoxicado una técnica adherida al propio surgimiento de la civilización. La meditación, antes de ser vista como una ceremonia aparatosa y pomposa, ya era llevada a cabo por culturas célticas hace decenas de siglos. Esa es la reflexión espiritual que se ha de buscar en la oficina; la informal que permite iniciar un pequeño viaje introspectivo mientras te llegan decenas de correos de trabajo.

Tal y como explican en Esto es Mindfulness, se puede meditar en menos de un minuto para alcanzar esa calma y claridad tan necesaria en momentos de estrés máximo. Inspira profundamente tres veces mientras posas tu mirada en un punto fijo alejado del ordenador. Entonces piensa conscientemente en el acto de respirar, y desliza las manos por todo aquello que tengas a tu alcance. Con ello ya estarás activando el "yo observador" y la "actitud participante", estarás, de hecho, meditando.

 

No hay recetas para la meditación

La meditación arrastra una extensa literatura. Con la proliferación de las redes sociales, el acceso a la información sobre esta técnica se ha democratizado. Y claro, con todo ello ha llegado la mala publicidad, los errores y los consejos malintencionados. Sin embargo, por muchas metodologías y cursos que existan, lo cierto es que no hay una receta universal. El objetivo último de la meditación es la relajación y la reflexión, y estas se pueden alcanzar recorriendo caminos muy diferentes.

Tan válido es obtener resultados en un minuto de evasión frente al ordenador, como encontrar un espacio reservado en la oficina para practicar una meditación más formal y ceremoniosa. Ni una ni otra técnica merece más atención. Y no solo eso: dependerá de cada momento la eficacia del camino elegido.

 

Mantente proactivo

Aunque la meditación en el trabajo no requiere de instalaciones ni medios físicos, si tienes recursos y dispones de una oficina, puede resultar interesante que reserves unos metros a un espacio dedicado para la meditación de los empleados. Debe ser una zona con cierto aislamiento sonoro, en el que las distracciones estén reducidas al mínimo. Si eres autónomo, busca un lugar en tu casa o despacho que te permita evadirte del trabajo.

 

 

En MÁSMÓVIL Negocios queremos que aprendas las principales claves de la meditación en el trabajo. Por ello y para que puedas aplicarlas con efectividad, te ofrecemos la mejor conexión y ofertas de fibra y móvil del mercado. Consulta más detalles en nuestra web o llámanos gratis al 1495 para conocerlas.

Y tú, ¿ya meditas durante la jornada laboral?