Si estás pensando en emprender, ya sabrás todo el trabajo que te espera: elaborar un plan de empresa, analizar a tu competencia, registrar tu marca o logo... A todas estas tareas se suma una duda recurrente: ¿qué sueldo ponerte cuando creas tu empresa?
Fijar cuánto dinero debes cobrar en este contexto no es tan sencillo como parece ya que la decisión puede tener implicaciones significativas para el crecimiento de la empresa, aparte de repercutir en el resto del equipo si este existe, y, por supuesto, en tu bienestar financiero personal.
Por eso, no te pierdas estos consejos para saber cómo fijarte el sueldo al crear una empresa. Con ellos conseguirás determinar la remuneración más justa posible y que no perjudique a tu negocio.
Consejos básicos a la hora de fijarte tu propio sueldo
Son varios los factores que debes tener en cuenta a la hora de saber el suelo que te has de poner si has creado una empresa. Como decimos, no es una cuestión sencilla. Fijarse un sueldo elevado podría ahogar la liquidez de la empresa, mientras que percibir poco dinero podría llevarte a problemas financieros personales.
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Para empezar, es interesante que te plantees elaborar un estudio de mercado, ya que te ayudará a conocer el salario medio para un puesto similar al tuyo en otras empresas del mismo sector. Esta información es muy útil porque te da una idea de lo que podrías ganar si estuvieras trabajando para otra persona. Así podrás determinar tu sueldo futuro de mejor forma.
Igualmente, recuerda tu nivel de responsabilidad. Si además de fundar tu empresa actúas como responsable de marketing o community manager, abarcas más tareas y toda carga de trabajo debe ser remunerada. Considera un salario que refleje todas estas responsabilidades.
Por último, valora en qué fase te encuentras. ¿Es tu empresa una startup en fase inicial o una empresa más establecida con un flujo de ingresos sólido? Las empresas en etapas tempranas a menudo requieren que los fundadores se sacrifiquen más en términos de salario para poder reinvertir en el negocio. En etapas posteriores, podrías tener más libertad para asignarte un salario más generoso. Pero al principio tocará apretar al máximo para que la empresa salga adelante.
La regla del 50-30-20
La regla del 50-30-20 es sumamente efectiva para poder determinar qué sueldo ponerte cuando creas tu empresa. Este método se atribuye comúnmente a la senadora estadounidense Elizabeth Warren, quien lo popularizó en su libro "All Your Worth: The Ultimate Lifetime Money Plan".
Esta regla ofrece una manera fácil de dividir tus ingresos netos (después de impuestos) en tres categorías principales:
- Tus necesidades (50 %): la mitad de tus ingresos netos deben destinarse a las necesidades básicas: vivienda, comida, transporte... Es decir, todo aquello imprescindible para tu bienestar básico.
- Gastos variables (30 %): el 30 % de tus ingresos se deben asignar a tus gastos variables, es decir, lo que no es esencial para vivir pero que mejora tu calidad de vida. Cenas, viajes, entretenimiento...
- Ahorros e inversiones (20 %): el 20 % restante se destina a ahorros e inversiones. Esto incluye cualquier contribución a fondos de retiro, ahorro para objetivos futuros (por ejemplo, comprar una casa), inversiones en el mercado de valores, o la amortización de deudas significativas que van más allá de las necesidades básicas.
De esta manera, lo primero que debes hacer es un cálculo de tus gastos reales y necesidades para saber cuál sería el sueldo mínimo que necesitas.
Desde MÁSMÓVIL esperamos haberte ayudado a saber qué sueldo ponerte cuando creas tu empresa. Sigue estos consejos para encontrar un punto de equilibrio que te permita mantener tanto las operaciones de la empresa como tus necesidades personales. Como decimos, si acabas de abrir un negocio fijarte un sueldo demasiado elevado puede repercutir negativamente a tu negocio.
