Los nuevos modelos de negocio están variando, en parte, por la situación del coronavirus. Muchos puestos de trabajo y empresas han aprovechado para dar ese paso hacia la no presencialidad y el trabajo full remote. El auge de la digitalización afecta a todos aquellos servicios que se pueden prestar sin necesidad de compartir espacio, de ahí que esté más extendido que nunca escoger entre una gestoría presencial y una online, por ejemplo. En este post vamos a analizar cuáles son las principales diferencias entre ambas y qué ventajas tiene cada una.
Todos los servicios, cada vez más digitales
La transformación digital es un proceso firme y eficaz en el que ambas partes, empresa y cliente, tienen mucho que ganar. Sin embargo, los servicios presenciales se han podido retomar con seguridad, por lo que acudir a una oficina físicamente vuelve a ser una opción para quien así lo prefiera.
A raíz de la pandemia, la digitalización se ha acelerado y ha puesto sobre la mesa otros modelos. Lo hemos visto en la Administración pública, que ya permite hacer la mayoría de trámites online gracias al certificado digital.
Hasta hace relativamente poco tiempo, acudir a la gestoría de forma presencial era la única opción válida. Pero ahora ya no es necesario acudir a la gestoría cada trimestre con la documentación a cuestas. Con la gestoría online todo se puede hacer de manera telemática, sin tener que desplazarse ni aportar impresos.
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Principales ventajas del modelo online
Ahorro de costes para ambas partes
Al tratarse de un modelo digital, el envío y recepción de la información afectan a ambas. Evitamos trabajar con papel - con el ahorro que eso supone respecto a impresiones y demás - y ganamos eficiencia en cuanto a la modificación rápida de datos por ejemplo.
Para algo tan importante como la facturación, es posible enviar todas las facturas en correo electrónico toda la información. ¡Se acabó almacenarlas en papel!
Facturación digital
Una gestoría online tendrá sí o sí softwares y herramientas digitales para trabajar con la documentación de sus clientes, sin necesidad de contacto físico en ningún momento. Se pueden enviar tanto facturas, como tickets o cualquier otra documentación por correo electrónico y así, ahorrar tiempo y desplazamientos.
Más asequible
Otro punto diferenciador es el precio. El ahorro de costes por un lado puede repercutir en la cuota: la mayoría de las gestorías online son más baratas que los modelos presenciales.
¿Es el fin de las gestorías presenciales?
Aunque cada una de ellas tiene sus propias ventajas, lo cierto es que decantarse por una u otra dependerá del modelo de negocio y del perfil - más digital o más analógico - de cada uno de ellos.
El hecho de tener la opción de contratar los servicios de una gestoría online no significa que vayan a desaparecer las gestorías presenciales. De hecho, hay muchas personas que siguen apostando por modelos presenciales más tradicionales porque prefiere el trato de tú a tú. La digitalización es un hecho, pero no significa que sea un proceso excluyente.
Como ves, optar por una gestoría online tiene muchas ventajas, pero depende de ti y de tu modelo de negocio escoger si es para ti o si prefieres seguir usando el servicio presencial de siempre.
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