En los tiempos que corren, las empresas necesitan adaptarse a las nuevas tecnologías y modelos de trabajo. Unas lo hacen con más facilidad que otras y ya han incorporado mejoras tanto para sí mismas como para sus empleados, y un ejemplo de ello es el teletrabajo.
En España tan solo el 27% de las empresas permiten a sus trabajadores desempeñarse desde casa. A pesar de que esta opción no está muy arraigada a nivel nacional, EE.UU y la mayoría de países europeos sí la han integrado en su modelo de trabajo. Sin embargo, se está quedando obsoleta y la alternativa ahora es el Smart Working. Esta metodología llegada desde los países anglosajones combina el trabajo fuera de la oficina con las TIC, lo que permite conciliar la vida laboral con la personal.
Qué es Smart Working
También te puede interesar: Coworking, qué es y qué ventajas ofrece a tu negocio
El Smart Working es un modelo de organización que te permite trabajar libremente donde tú quieras y en base a unos objetivos, no a un horario establecido. Es un sistema que tiene cada vez más peso en países anglosajones y que, poco a poco, va calando en nuestro país.
La idea es que este sistema permite que una empresa tenga a sus trabajadores distribuidos por diferentes territorios y husos horarios, pero estando todos conectados entre sí a través de diferentes herramientas.
Aplicando este sistema, la plantilla debe estar muy comprometida para que el rendimiento no decaiga. Más que nada porque no hay que confundir Smart Working con teletrabajo, ya que la base es la misma pero hay notables diferencias.
Diferencias entre Smart Working y teletrabajo
Aunque parezcan la misma cosa, hay diferencias muy notables entre Smart Working y trabajar desde casa.
En ambos casos tienes la libertad de no tener que acudir a una oficina con las ventajas que ello conlleva, pero en el caso del teletrabajo sigues teniendo un horario marcado.
De esta manera, tus superiores directos han establecido una hora de entrada y de salida que debes cumplir. Y aquí es donde radica la gran diferencia entre teletrabajo y Smart Working. Principalmente, porque en este último caso tienes una libertad de movimientos mucho mayor.
De esta manera, tienes un horario de trabajo muy flexible. En muchos casos es el propio trabajador el que decide las horas a las que quiere empezar o terminar su jornada, siempre y cuando se cumpla el horario de disponibilidad marcado.
Con ello, las personas que trabajan en una empresa que está aplicando Smart Working tienen una libertad de movimientos mucho mayor, pudiendo administrar mejor el tiempo y hacerlo en función de sus necesidades. Por eso es mucho más fácil conciliar la vida personal y familiar con el trabajo.
Google y otras empresas apuestan por este sistema
Gracias a ello, los trabajadores están más a gusto al tener menos dificultades en términos de horario, lo que se traduce en una mejor productividad. Cabe destacar que empresas de la talla de Google ya aplican este sistema.
En el caso del gigante de Internet, la gran G cuenta con una plantilla de trabajadores amplísima, por lo que no todo su personal cuenta con Smart Working, pero en el caso de Google este sistema va un paso más allá al no establecer horarios, sino objetivos.
Si por ejemplo estás en un grupo de programación y debes hacer que al pulsar dos veces sobre el icono de Gmail cambie de color, Google te pide que lo tengas hecho para una fecha determinada. Da igual que quieras quitarte el trabajo de encima y adelantarlo lo antes posible, o que quieras dejarlo para el último momento y estirar unos días tus vacaciones. Mientras cumplas con los objetivos, no habrá problema alguno.
Y es que este sistema está en auge. Por un lado, la pandemia del coronavirus que empezó en 2020 provocó que muchas de empresas tuvieran que adaptarse a un sistema de teletrabajo. Esto ocasionó que miles de trabajadores descubrieran las ventajas de trabajar desde casa, pudiendo conciliar mejor la vida laboral y familiar.
Además, muchas empresas vieron que la productividad mejoró, por lo que han mantenido este sistema de trabajo desde casa. Y algunas de ellas han comenzado a aplicar Smart Working viendo las ventajas que ofrece, como podrás comprobar más adelante.
Cómo aplicar Smart Working en tu empresa
Lo cierto es que Smart Working es una herramienta de trabajo muy útil en determinados negocios, por lo que si quieres aplicar esta metodología de trabajo en tu empresa, debes tener en cuenta algunas cosas.
Para empezar, debes establecer una serie de pautas y que tus empleados cuenten con las herramientas necesarias, además de dejar muy claras las condiciones para evitar futuros malentendidos.
Lo mejor que puedes hacer es, en primer lugar, identificar a las personas que pueden beneficiarse del Smart Working. Una vez hecho, establece objetivos y concreta cómo se llevarán a cabo.
Define las formas de comunicación que realizaréis y, si es necesario, qué horarios son imprescindibles (de 12:00 a 13:00 porque es la hora de las reuniones, por ejemplo).
Por último, deben tener a su alcance todas las herramientas adecuadas para poder desarrollar su trabajo con normalidad en casa y sin depender de un horario.
Por ejemplo, aplicaciones o una interfaz para acceder a información almacenadas en los servidores de la empresa y otros programas que pueden ser necesarios para poder desempeñar este trabajo.
Ventajas y desventajas del Smart Working
Si quieres conocer cuáles son las ventajas y desventajas del Smart Working, nosotros te contamos algunas de ellas a continuación.
Ventajas del Smart Working
Consecución de objetivos
El método de Smart Working está fundamentalmente basado en la consecución de objetivos, es decir, lo importante es que completes las metas que te marques a lo largo de la semana. De esta manera, tu motivación aumenta y las horas más productivas las dedicas a finalizar tus labores pendientes.
Movilidad
La incorporación de las nuevas tecnologías al teletrabajo facilita las vías de comunicación entre empresa y empleados, como es el caso de las teleconferencias, los grupos de trabajo en mensajería instantánea o las aplicaciones de gestión de proyectos.
Esto hace que puedas completar tus tareas desde cualquier lugar que tenga conexión a Internet como, por ejemplo, tu casa, el aeropuerto o tu cafetería favorita. Sin duda alguna, esta es una de sus características principales.
Flexibilidad horaria
Otra de las ventajas que ofrece es la posibilidad de establecer tu propio horario. Si tienes algún recado que hacer o tu vuelo sale enseguida, el Smart Working te permite realizar una pausa y retomar la actividad más tarde.
Recuerda que se basa en la consecución de objetivos, no en trabajar una cantidad de horas determinadas, por tanto, te otorga la facilidad de desconectar cuando lo necesites.
Desventajas del Smart Working
Aislamiento del empleado
Aunque este método de trabajo aporta mejoras, también tiene desventajas como es el aislamiento del empleado. Trabajar fuera de la oficina supone no socializar de manera directa con tus compañeros y puede que las relaciones laborales que establezcas sean prácticamente impersonales. Así, es posible que el ambiente laboral se convierta en un inconveniente al no ser fluido.
Aumento de distracciones
La movilidad, que es una ventaja, puede transformarse en algo desfavorable. El teléfono móvil, la televisión o las personas que se encuentran a tu alrededor quizás sean motivo de distracción. En una cafetería, por ejemplo, cabe la posibilidad de que te encuentres con gente conocida y pierdas tu concentración, llegando, incluso, a dejar las tareas incompletas. Lo mismo ocurre con el entorno familiar, puede convertirse en un inconveniente y reducir la productividad.
En MÁSMÓVIL Negocios queremos ayudarte a teletrabajar. Por ello, y para que fuera de la oficina estés siempre conectado con tus compañeros, hemos creado las mejores ofertas de fibra y móvil pensadas para empresarios. Consulta más detalles en nuestra web o llámanos gratis al 1495 para conocer más sobre nuestras ofertas.