Todo los empleados sabemos lo importante que es sentirse feliz en el trabajo. En la mayoría de las ocasiones, contar con bienestar laboral influye directamente en la eficiencia y calidad de nuestras tareas. Pero ¿te ha ocurrido alguna vez que te sientes algo desmotivado o saturado?

A menudo este tipo de situaciones se suele relacionar con falta de interés de la compañía y creemos que para mejorar nuestra situación solo influyen factores externos como subidas salariales o mejoras en la conciliación. Sin embargo, uno de los principales factores de cambio para encontrarte más feliz en tu puesto de trabajo es la automotivación.

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La automotivación

Lo primero que debemos tener claro es que motivarnos no depende de otros, sino que debe de empezar por uno mismo. Se trata de desarrollar la habilidad de ilusionarnos con lo que tenemos sin que nada más influya. Evidentemente cada empleado se motiva de forma distinta, pero seguro que estos consejos te sirven de guía para encontrar un bienestar laboral.

 

Encuentra el sentido a lo que haces

Lo primero que debes saber es que si estás dentro de la empresa es por algo. Encuentra por qué aportas valor a tu compañía y cómo beneficias con tu trabajo. Es importante que también determines los pros y contras de tu empleo para saber por qué el esfuerzo que realizas merece la pena.

 

Determina tus metas

A menudo la desmotivación aparece porque no tenemos claro hacia donde queremos ir. Por tanto, define tus objetivos y éstos te llevarán a desarrollar actitudes para lograrlo. Te sentirás activo e ilusionado.

 

Por otra parte, es importante que las metas fijadas sean realistas y alcanzables. Una vez lo hayas conseguido, renueva tus objetivos para no volver a estancarte.

 

No tengas miedo al fracaso

Aprender a automotivarse implica correr ciertos riesgos que a menudo te llevarán a celebrar logros, pero también te puede llevar a cometer errores. Tómate tus fallos como área de mejora y de aprendizaje.

 

Prémiate

Los esfuerzos se llevan mejor cuando son reconocidos y recompensados. Así que cuando cumplas aquellos objetivos o pequeñas tareas que tanto te han costado, date un capricho para mantener la motivación y afrontar nuevos retos.

 

La actitud

Es muy importante que seas positivo y optimista. Aléjate de los pensamientos negativos y cree en ti, de esta forma conseguirás tener una gran energía.

 

Además, aprende a disfrutar de tu trabajo y a proponerte como un reto todas aquellas tareas que te resultan más complicadas, esto te llevará a superarte y salir de tu zona de confort.

 

Rodéate de gente positiva y exitosa, mientras te alejas de todos aquellos compañeros tóxicos que no te permitan avanzar en tu entorno laboral.

 

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Y tú, ¿sabes automotivarte en el trabajo?