La vuelta de las vacaciones puede ser dura. Cuando el periodo de descanso laboral finaliza, tanto plantilla como dueños de negocios pueden verse afectados en lo que se conoce como síndrome posvacacional. Este síndrome es un fenómeno que puede traducirse en desmotivación, fatiga y una marcada disminución en la productividad, por lo que no es algo que deba tomarse a la ligera.
Para los propietarios de pequeñas empresas, encontrar maneras efectivas de manejar esta transición puede ser la clave para mantener el ritmo del negocio durante todo el año. Así que no te pierdas estas estrategias y consejos para encarar mejor el regreso de las vacaciones.
Consejos para la vuelta de las vacaciones
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Para empezar, la clave para una transición suave a menudo está en la preparación. Antes de que el equipo se vaya de vacaciones, debería haber una revisión exhaustiva de los proyectos y tareas pendientes. No dejes de leer nuestra guía para planificar el trabajo antes de las vacaciones, en la que encontrarás ideas muy interesantes para evitar el temido síndrome posvacacional.
Una de las mayores dificultades que enfrentan los empleados al volver de un periodo de descanso es el choque abrupto entre el descanso y las responsabilidades laborales que se reinician. Y es que la vuelta de vacaciones debería ser agradable pero no siempre lo es, por lo que es mejor tener una comunicación abierta con quienes se reincorporan: hablar de su carga de trabajo, ayudarles a recuperar el ritmo poco a poco, que se sientan correspondidos y atendidos...
Por este motivo, un periodo de adaptación es crucial para evitar fricciones. Una buena idea es intentar crear en la oficina un ambiente lo más agradable posible para que los empleados puedan relajarse y acusar menos la vuelta de las vacaciones. Un desayuno para quienes se reincorporan o un primer día en el que solo se centren en revisar correos y tareas pendientes, si es posible, son excelentes ideas.
Tampoco debe faltar el refuerzo positivo. Un simple "Buen trabajo" o un pequeño incentivo pueden tener un impacto significativo en la moral de la plantilla. Aunque no lo creas, este y otros estímulos son remedios muy eficaces para vencer la inercia posvacacional.
Deporte y alimentación, vitales para la vuelta
Aparte de ayudar en lo posible a que la transición de vuelta a la rutina sea lo más suave posible, hay dos hábitos fundamentales que la empresa puede fomentar durante todo el año y no solo a la vuelta de las vacaciones. Igualmente, también puedes tratar de adaptarlos tú para evitar este síndrome.
Hablamos de llevar una buena alimentación y de hacer algo de ejercicio. Por un lado, la comida adecuada puede ayudar a reducir los niveles de estrés ya que los alimentos que consumimos pueden tener un efecto significativo en nuestro ánimo y estado general.
En este sentido, algunos ejemplos de alimentos que pueden ayudarte a que te sientas mejor son los pescados como el salmón, la caballa y el atún, que al ser ricos en ácidos grasos omega-3 pueden ayudar a reducir la ansiedad. También las nueces, las almendras, las semillas de chía y calabaza, que además de contener vitaminas y ser ser antioxidantes pueden ayudar a reducir el estrés. No dudes en cuidar tu alimentación para controlar los niveles de cortisol y reducir este síndrome.
Por otro lado, el deporte o algo de actividad física que evite el sedentarismo han demostrado ser excelentes herramientas para combatir el estrés, tanto en el plano físico como psicológico. La razón es que el ejercicio estimula la liberación de endorfinas, que son neurotransmisores que actúan como analgésicos naturales del cuerpo. Estas sustancias químicas mejoran el estado de ánimo y proporcionan una sensación de bienestar, lo que a menudo se conoce como el "subidón del corredor".
Desde MÁSMÓVIL queremos ponerte las cosas más fáciles para que la vuelta al trabajo tras las vacaciones sea un proceso lo más agradable posible. Así que no dudes en seguir estos consejos para cuidar cuerpo y mente.
