Tal y como es sabido, recientemente se anunció una subida del SMI. El sueldo mínimo interprofesional está establecido actualmente en 950 euros. El aumento de 15 euros del salario mínimo para 2021, acordado por el gobierno y los sindicatos, podría afectar a diferentes colectivos. Algunos de ellos reciben prestaciones por desempleo u otras prestaciones del SEPE, y hasta ahora se han planteado dudas sobre cómo les afectará.
Cómo suele ser habitual, otro de los colectivo que se verá afectado es el de los autónomos. En este caso, con un aumento del SMI, aumenta la cotización mínima, así como la cuota de autónomos. A medida que aumenta el salario mínimo, también aumenta la cantidad que los autónomos deben pagar a la Seguridad Social y también aumenta el salario de los trabajadores, en el caso de que los tengan. El total a pagar por la contratación de trabajadores aumenta en un 30% más que el salario bruto.
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Los efectos del incremento del SMI
Como decimos, actualmente, el salario mínimo está fijado en 950 € en 14 pagas, y con este incremento los autónomos verán un incremento en sus cuotas. Subirán las cuotas correspondientes a contingencias profesionales, que pasan de 1,1% a 1,3% y por cese de actividad, de 0,8% a 0,9%, por lo que las cuotas totales pasan del 30,3% al 30,6% de la base de cotización. El aumento no supondrá el mismo importe para todos los autónomos, sino que dependerá de la base de cotización de cada uno.
El trabajador autónomo que haya fijado un mínimo, aumentará su cotización a la seguridad social de
Además, el incremento del coste para el empresario siempre es mayor que la subida neta para el empleado que percibe el SMI. Tomando como referencia la última subida del salario mínimo, que fue de 50 euros al mes, para el empleador, incluyendo el salario bruto, los gastos de la Seguridad Social a cargo de la empresa y del trabajador, el coste total pasó de los 1.394 euros a 1.471 euros, es decir, 77 euros más al mes.
Un incremento relativamente modesto, pero que es bastante mayor si tomamos como referencia el SMI de 2018, cuando el coste total del trabajador para el trabajador era de 1.139 euros. El alza del coste en apenas dos años ha sido de 332 euros al mes por trabajador. Así, en términos anuales, los costes laborales se incrementaron en casi 4.000 euros por trabajador que estuviera percibiendo el SMI.
El efecto no es igual en todas partes
El SMI es el mismo para toda España, aunque no tiene el mismo impacto para todos los sectores ni para todas las Comunidades Autónomas. Los autónomos que tengan empleados a su cargo tendrán más o menos dificultades para afrontar estos gastos dependiendo de la productividad de su sector o región. Por ese motivo el impacto del alza del SMI será muy pequeño en las Comunidades Autónomas como Madrid, País Vasco, Navarra o Cataluña, que encabezan el ranking de PIB per cápita de España.
Además, algunos expertos prevén que estas diferencias entre regiones, podría provocar que el alza del SMI desplace del mercado laboral a grupos de la fuerza laboral que ya se encuentran en alto riesgo de exclusión.
La subida del SMI tendrá mayor efecto en los sectores con uso más intensivo de mano de obra y con menor introducción de la tecnología. Algunos ejemplos lo tenemos en el comercio o la hostelería, que serán los que más acusen la subida. En este grupo también se incluyen los agricultores y el sector de actividades administrativas.
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