La comunicación corporativa es una de las armas más potentes de las que dispone una empresa para dar visibilidad a sus servicios, posicionarse en el mercado y mejorar la reputación de sus marcas. Su correcta utilización puede ayudarnos a alcanzar nuestros objetivos, pero para ello necesitaremos una estrategia bien definida detrás.

A continuación te mostramos paso a paso todo lo que el Plan de Comunicación de tu empresa debe incluir para lograr que todos hablen -bien- de ti:

El Plan de Comunicación que necesita tu empresa

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Análisis

Para ponernos en contexto y comenzar a definir cuál es la estrategia de comunicación que nuestra empresa necesita lo primero que debemos realizar es un análisis tanto propio como externo.

En el primer caso, una metodología común es el DAFO, una técnica mediante la que podremos detectar nuestras Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades. Las conclusiones extraídas de este análisis nos ayudarán a establecer de manera objetiva el marco en el que nos moveremos.

Atendiendo al segundo, podremos recurrir a estudios sectoriales o llevar a cabo nuestro propio benchmarking, es decir, realizar una comparativa sobre nuestra competencia en función de las mejores prácticas comunicacionales.

Define tus objetivos

Uno de los puntos más importantes es establecer cuál o cuáles serán nuestros objetivos: ¿queremos darnos a conocer? ¿pretendemos mejorar la reputación de nuestra empresa? ¿mejorar las ventas? ¿posicionar a nuestros portavoces?

En función de ello nuestro target o público objetivo será diferente, y en consecuencia lo canales a través de los cuáles llegaremos a ellos también.

Canales de Comunicación

Diferentes públicos, diferentes canales, diferentes mensajes. Es la regla de oro. Las redes sociales jugarán un papel decisivo en nuestra estrategia, no hay duda, pero deberemos adaptar nuestros contenidos a lo que nuestra audiencia espera leer en cada uno de ellos. Además de los medios propios -redes sociales, blogs, newsletters, etc.-, cabe también tener en cuenta a los medios ganados -medios de comunicación tradicionales afines que utilizarán nuestras noticias y expertise como fuente de información- y los pagados -que requerirán inversión publicitaria-.

Plan de Acción

Una vez analizado el entorno, a nuestra propia empresa, los mensajes que queremos transmitir y los canales a través de los cuales los lanzaremos, toca definir las acciones que llevaremos a cabo. Para ello es fundamental saber el presupuesto con el que contaremos y marcar el horizonte temporal en el que se llevará a cabo.

Además, una vez establecidas, necesitaremos calendarizarlas. De este modo podremos organizar el contenido en función de la hora, del día o del tipo de campaña -puntual o a largo plazo-.

 

 

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Y tú, ¿cuál crees que es la mejor estrategia para mejorar la comunicación de tu empresa?