La definición que describe qué es una acción preferente es la de título que representa una propiedad parcial sobre una compañía. Pero estas acciones tienen una serie de características que hacen que resulten muy interesantes para los inversores. En ocasiones, el accionista intenta obtener este tipo de títulos para que el valor de la compañía que posee sea lo más atractivo posible de cara a su gestión y de cara a una posible venta.

Por otro lado, para tener más información sobre lo que es una acción preferente y su definición, hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos de acciones preferentes que tienen unas características muy concretas.

  • Acciones preferentes acumulativas: este tipo de acciones permiten que los dividendos no pagados se puedan acumular para efectuar un pago futuro. Además, el cobro de los dividendos de las mismas prevalece sobre el que se establece para las convencionales.
  • Acciones preferentes no acumulativas: en este caso, los dividendos de las acciones no pagados en su periodo, no se pueden acumular para pagos futuros. Las instituciones bancarias suelen emitir este tipo de acciones.
  • Acciones preferentes convertibles: estas acciones se pueden transformar en acciones ordinarias, siempre que su propietario lo desee.
  • Acciones preferentes intercambiables: son acciones preferentes convertibles que la compañía emisora puede cambiar por deuda convertible.
  • Acciones preferentes de renta mensual: se trata de acciones que se sitúan en un punto intermedio entre una deuda subordinada y la acción preferencial.
  • Acciones preferentes participantes: con estas acciones el titular tiene derechos sobre los dividendos habituales y sobre las ganancias adicionales que pueda tener una empresa. Aunque todo esto queda sujeto a ciertas condiciones.
  • Acciones preferentes perpetuas: son acciones que puede liquidar el emisor.

¿Qué diferencia hay entre la acción preferente y ordinaria?

Las acciones preferentes y las ordinarias tienen similitudes como el hecho de estar condicionadas a los objetivos que pueda tener la empresa. Además, en ninguno de los dos casos hay fechas de vencimiento. Pero también hay una serie de diferencias que sirven para concretar que es una acción preferente. Una de ellas es que las acciones preferentes no cotizan en bolsa, a diferencia de las ordinarias que sí lo hacen. A partir de ahí, surgen 3 aspectos diferenciales.

  • Cobro de dividendos: en las acciones preferentes el dividendo se establece cuando se emite la propia acción y su pago tiene preferencia sobre el de una acción ordinaria. Mientras que en las ordinarias el pago de esos dividendos no está garantizado y su emisión está sujeta a la obtención de beneficios de la empresa.
  • Derecho de voto: los titulares de las acciones preferentes no tienen derecho de voto en las juntas de accionistas. Pero los propietarios de las acciones comunes sí tienen ese derecho.
  • Pago de activos: el derecho de cobro de los titulares de las acciones preferenciales prevalece sobre el de los propietarios de las acciones comunes cuando una sociedad pasa a ser liquidada.