A la hora de dirigir equipos de trabajo, podemos encontrar diferentes perfiles de liderazgo. Pero todos comparten una característica deseada: la capacidad de liderar con inteligencia emocional. En este post te explicamos las claves sobre este concepto, un objetivo buscado por cada vez más empresas, que ha demostrado tener claras ventajas.
¿Qué es la inteligencia emocional en el liderazgo?
La inteligencia emocional, un concepto popularizado por Daniel Goleman en los 90, se refiere a la capacidad de reconocer, comprender y gestionar las propias emociones, así como influir en las emociones de los demás.
Liderar con inteligencia emocional se convierte en un arma de lo más efectiva, porque considera el entorno empresarial como un espacio donde las personas son el recurso más valioso.
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Como explican desde ADP, el psicólogo estadounidense David McClelland analizó en 1998 a más de 30 organizaciones, y llegó a la conclusión de que aquellas que poseían competencias en inteligencia emocional habían superado entre un 15 % y un 20 % sus objetivos anuales de ingresos.
Así que esta habilidad no solo se traduce en una mayor empatía, mejores relaciones interpersonales y una capacidad superior para tomar decisiones en momentos críticos, sino que además es muy rentable para una empresa o negocio.
Cómo influye la inteligencia emocional en el liderazgo
Uno de lo puntos más importantes del liderazgo con inteligencia emocional es la toma de decisiones. Un líder con este tipo de skills sabe cómo actuar en situaciones de estrés, y podrá tomar las decisiones más adecuadas si conoce bien cómo reacciona su cuerpo y mente en situaciones semejantes.
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Además, la inteligencia emocional en el liderazgo es importantísima en la gestión de equipos. Para empezar, un líder emocionalmente inteligente se comunica de manera clara. Como comprende las emociones de su equipo, puede adaptar su mensaje para asegurarse de que sea bien recibido. Con ello se fomenta un entendimiento entre los primeros puestos de la organización y el resto de empleados, consiguiendo que vayan en la misma dirección y evitando malentendidos.
Por otro lado, un equipo que confía en su líder está más motivado y comprometido. De este modo es más fácil crear lazos de confianza y asegurar que los miembros del equipo trabajen juntos hacia objetivos comunes.
Aunque los conflictos son inevitables en cualquier organización, si se aplica liderazgo con inteligencia emocional se podrán solucionar los desacuerdos de forma constructiva y encontrando una solución que beneficie a todas las partes involucradas.
Además, ten en cuenta que un equipo liderado con inteligencia emocional y que está comprometido querrá seguir en la empresa. Y la retención del talento se ha convertido en algo básico en cualquier organización.
Por último, pero no menos importante, no podemos olvidarnos de la digitalización que están viviendo miles de empresas y pequeños negocios. Un líder con alta inteligencia emocional sabrá guiar a sus equipos en este tipo de transiciones difíciles, y ayudará a afrontar temores y preocupaciones.
Desde MASMOVIL NEGOCIOS esperamos haberte ayudado a comprender qué es la inteligencia emocional en el liderazgo y su importancia a la hora de dirigir organizaciones y empresa.
