Cada vez que se habla sobre qué es el target, se hace referencia al grupo de personas para el que está diseñado el producto o servicio que ofrece una empresa. El target es muy valorado porque permite conocer en profundidad a los clientes potenciales. Esa información es muy útil y se usa para diseñar las estrategias de mercado necesarias para llegar a ese público y cumplir con sus expectativas.

Para obtener el mayor potencial posible de los datos extraídos del target es necesario hacer una segmentación adecuada que sirva para conocer a la audiencia potencial. Estos son los parámetros fundamentales de la segmentación.

  • Intereses: conocer las tendencias e intereses de los clientes potenciales es muy útil porque permite generar mensajes personalizados y basados en datos.
  • Subculturas: se trata de un conjunto de personas que tienen experiencias comunes, entre ellas se encuentran las opciones de ocio, los hábitos de consumo o los gustos musicales y cinematográficos.
  • Intención real de la compra: este parámetro define a los grupos de personas que están en la búsqueda de un producto concreto. Conocer a estas personas sirve para generar esos mensajes estratégicos con los que se sientan identificados.

¿Qué significa target en español?

Al concretar qué significa target en español aparece la traducción de público objetivo. Definirlo es esencial y para que el público objetivo quede debidamente delimitado es necesario dar una serie de pasos.

El primero de ellos se basa en conocer a la audiencia. Para desarrollar este punto hay que saber a quienes les pueden interesar los productos que se ofrecen. Para tener más datos sobre ellos es conveniente establecer sus datos básicos entre los que se encuentran el sexo, la edad, el país de procedencia o el estado civil.

También hay que delimitar las características de las personas analizando aspectos como su estilo de vida, el nivel de trabajo, las costumbres de compra, los problemas y preocupaciones con la forma de reaccionar ante ellos, los sueños y objetivos y las formas de relacionarse. Pero también hay que medir otros elementos esenciales.

  • Identificación de tendencias del mercado para crear mensajes que destaquen el valor añadido del producto que se ofrece.
  • Análisis y revisión de la competencia contrastando las formas que tienen para llegar a su público objetivo.
  • Crear un buyer persona. Es decir, un perfil ficticio del cliente ideal.
  • Definición del valor añadido y de los beneficios que aporta el producto que se lanza al mercado.
  • Crear la declaración de la marca que es producto de un resumen de todos los puntos anteriores.

Identificar correctamente al público objetivo es fundamental porque permite enfocar estrategias, administrar recursos de forma eficiente y garantizar que el producto cumple todas las funciones para las que fue creado.