Un autónomo es una persona física que realiza un trabajo de forma independiente y personal para uno o varios clientes. El primer aspecto que llama la atención en este tipo de trabajadores es que realiza su labor profesional por cuenta propia y de forma lucrativa, pero no tiene ningún contrato que lo ate a una persona o a una empresa. Este profesional es contratado de una forma más o menos habitual para que preste sus servicios.
Es frecuente que haya personas que valoren la posibilidad de convertirse en trabajadores autónomos o que finalmente decidan hacerlo. La gran ventaja de trabajar por cuenta propia es que la persona no está ligada a las órdenes de un jefe y en muchos casos puede distribuir su tiempo de la forma que mejor le convenga mientras cumpla con los plazos y con las exigencias de la persona o de la empresa que lo contrata.
¿Cómo hacerse autónomo?
Uno de los requisitos que hay que cumplir para trabajar de esta forma es darse de alta como autónomo en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). Además, es indispensable ser mayor de edad y el propio autónomo es el que tiene que encargarse de realizar las aportaciones correspondientes a la Seguridad Social, por ese motivo muchos de ellos cuentan con los servicios de una asesoría fiscal o contable. Este trabajador también tiene que estar al corriente del Estatuto del Trabajador Autónomo donde aparecen todos sus derechos y obligaciones.
Otro de los trámites indispensables es causar alta como autónomo en la Seguridad Social. Esto supone hacer frente a una cuota mensual que se aporta a modo de cotización. Además, esta cuota sirve para cubrir al autónomo en caso de sufrir un periodo de accidente o de tener que causar una baja laboral.
¿Qué es la tarifa plana de autónomo?
Cuando el trabajador autónomo se da de alta tiene que escoger una mutua médica que le cubra ante alguna circunstancia que le impida desarrollar su actividad con todas las garantías. También hay que tener en cuenta que la cuota de autónomo que abona a la Seguridad Social es una tarifa plana de autónomo que la administración carga en su cuenta bancaria y que aumenta cada 36 meses dependiendo de sus ingresos. Este hecho obliga al trabajador a valorar los pros y los contras de darse de alta. Además, es conveniente que tenga ahorrada una cantidad de dinero por si hay que hacer frente a contratiempos.
Por otro lado, el autónomo tiene que darse de alta en la Agencia Tributaria y contactar con administraciones públicas como los Ayuntamientos en caso de necesitar permisos para desarrollar su actividad. También deben contratar los seguros que sean necesarios para realizar su labor profesional y estar al día de los programas de ayudas para autónomos que pueden suponer un impulso para su negocio y para sus finanzas.
