Hasta ahora te hemos dado los tips necesarios para aumentar tus ventas y mejorar tus habilidades, pero también es necesario saber cómo finalizar la relación con un cliente. En estos casos debes aprender a cerrarla con elegancia para evitar quemar puentes y cerrar puertas a futuras colaboraciones.
Por un lado, quedarás bien al demostrar educación e interés por su proyecto más allá de una relación comercial. Por otro lado, las dinámicas del mercado son tan volátiles que nunca está de más poder recurrir a antiguos clientes. En este post te mostramos las claves para hacer una despedida elegante.
Cómo finalizar una relación laboral sin romper por completo con el cliente
El arte de finalizar una relación comercial de manera amistosa radica en la habilidad para comunicar de forma clara, profesional y empática las razones detrás de la decisión. Por tanto, una comunicación sincera con los clientes es muy importante.
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Es básico ser transparente durante la despedida del cliente y explicar el motivo por el que has tomado la decisión: ajustes presupuestarios, gran volumen de clientes... En cualquier caso, déjalo claro para que entienda la situación.
Siempre es una buena idea abrir una puerta a futuras relaciones comerciales. Por eso, si quieres finalizar la relación con tu cliente por motivos personales (por ejemplo, falta de alineación de valores) puede que prefieras reservarte esa sinceridad.
En cualquier caso, recuerda agradecer a tus clientes por la oportunidad de haber trabajado juntos. Habla de los aspectos positivos de la colaboración y no cierres la puerta a futuras oportunidades.
Trata de dejar un buen sabor de boca a tus clientes tras finalizar las relaciones comerciales. Para ello, un punto muy positivo es que la comunicación se produzca con antelación suficiente para no perjudicarles en sus negocios y que puedan anticiparse al cambio de dinámicas. Si informas con tiempo sobre la finalización de las relaciones comerciales demostrarás respeto y consideración, podréis planear los próximos pasos y el cliente podrá encontrar a otro proveedor para cumplir con todos sus compromisos pendientes.
Tampoco dudes a la hora de ofrecer ayuda durante el periodo de transición, ya que puede aliviar cualquier tensión residual por la despedida del cliente y reforzar la buena voluntad hacia ellos. Y seguramente le ayudarás a integrar un nuevo proveedor, cosa que agradecerá.
Esta ayuda puede incluir: formar a su nuevo proveedor, responder preguntas, facilitar todo el proceso de transición, etc. Con ello reforzarás la imagen de que te preocupas por tus clientes hasta el final, lo que te ayudará a restablecer futuras relaciones comerciales si fuera necesario.
Por último, tampoco está de más hacer un seguimiento tras la finalización de la relación, especialmente con clientes con los que hayas tenido una buena colaboración, para confirmar que no quedan asuntos pendientes. De paso, dejas claro que te interesas por tu cliente más allá del trato comercial.
Con estos consejos, la comunicación y relación con tus clientes tras la finalización de las relaciones comerciales no cerrará puertas a futuras colaboraciones. Considera crear un guion para ir preparando la despedida del cliente para que sea lo menos traumática posible y el proceso de transición sea agradable para ambas partes.
Desde MÁSMÓVIL NEGOCIOS esperamos haberte ayudado a entender la importancia de despedirte con elegancia y las claves para que finalizar la relación con clientes no signifique cerrar puertas.
