Para llevar un negocio a buen puerto, tener controladas las cuentas es básico. Pero hay un elemento que pasa desapercibido con mucha frecuencia: los costes invisibles en un negocio. Te contamos todo lo que debes saber: qué son y cómo controlarlos.
Qué son los gastos invisibles en un negocio
Hablamos de los costes que no aparecen a simple vista pero que afectan directamente a la rentabilidad. No figuran de forma clara en una factura y tampoco saltan a la vista cuando revisas el balance del mes, pero están ahí. Y si no se controlan, terminan restando margen sin que acabes de entender por qué tus números no cuadran.
También te puede interesar: Ideas de negocio sencillas y rentables para trabajar por Internet
Los costes invisibles pueden provenir de tiempos muertos en la cadena de trabajo, o tareas que se repiten por falta de procesos claros. En muchos casos también aparecen por un mal uso de los recursos: energía desaprovechada, fallos de coordinación entre equipos, errores que obligan a rehacer tareas, paradas por falta de materiales, máquinas que funcionan por debajo de su capacidad real, horas de personal que se pierden entre esperas o incluso pequeñas compras espontáneas que parecen insignificantes, pero que sumadas llegan a pesar más de lo que imaginamos.
Todo esto genera un gasto que no se refleja como tal en ninguna partida visible, pero que se come la eficiencia del negocio poco a poco. Por eso es necesario saber localizarlos.
Cómo controlar los costes ocultos de la producción
En primer lugar, debes entender dónde se está escapando el dinero para recuperarlo.
También deberías saber: Economía de escala: qué es y por qué implementarla en tu negocio
Para ello, revisa al detalle todas las áreas de tu negocio. Por ejemplo, revisar procesos, tiempos, flujos de trabajo y roles dentro del equipo. Muchas veces un pequeño cambio en la organización acaba reduciendo costes sin tocar ni un euro de inversión.
También debes revisar cada cierto tiempo los contratos con proveedores y los consumos básicos. Detectarlo y renegociar no solo recorta costes ocultos, sino que además mejora la salud financiera del negocio sin afectar al ritmo de trabajo.
Además, puedes llevar un registro detallado de todas las actividades que consumen tiempo y recursos. Cuando se mide lo que sucede en el día a día, aparecen patrones que antes pasaban desapercibidos. Por ejemplo, si detectas que a la hora de comer cae la producción en picado, el motivo puede ser que todo tu equipo come a la misma hora. A partir de aquí se pueden introducir mejoras que vayan desde reorganizar tareas hasta automatizar partes del proceso que se repiten de forma manual (siguiendo con este ejemplo, sería suficiente con establecer un horario de comidas).
Por último, la formación de tu equipo es muy importante. Los empleados que conocen bien las herramientas y los procedimientos cometen menos errores y aprovechan mejor el tiempo. Recuerda: evitar fallos es una forma directa de reducir gastos invisibles que muchas empresas pasan por alto.
Desde MASMOVIL NEGOCIOS esperamos haberte ayudado a comprender qué son los costes ocultos en un negocio y cómo evitarlos. Con estos tips podrás tomar las medidas adecuadas para evitar estos gastos invisibles y maximizar los beneficios en tu empresa.