Existen las comúnmente llamadas leyes empresariales que conviene conocer al detalle, como la ley de Parkinson, y entre ellas está la ley de Hofstadter. En este post te contamos cómo puedes aplicarla en tu negocio para mejorar la planificación y aumentar la productividad.
Qué es la ley de Hofstadter
La ley de Hofstadter nació como una reflexión casi irónica sobre nuestra capacidad para calcular tiempos. Douglas Hofstadter, escritor y científico cognitivo, observó que cualquier tarea suele llevar más tiempo del que creemos, incluso cuando contamos con la previsión de que probablemente va a ser largo de por sí.
También te puede interesar: Qué es la niebla mental en los negocios
La ley de Hofstadter se aplica en el día a día, pero se ha convertido en una herramienta muy importante en los negocios. Basta pensar en algo tan sencillo como montar un mueble, preparar una presentación o planificar un viaje. Tendemos a imaginar la versión ideal del proceso, sin interrupciones, sin imprevistos que acaban acumulando minutos y horas. Esto es justo lo que dejamos fuera, provocando que la distancia entre nuestro plan y la realidad sea más amplio de lo que habíamos pensado en un principio.
Sabemos que solemos subestimar los plazos, ajustamos ese cálculo y aun así nos volvemos a quedar cortos. Lo que sucede es que infieren circunstancias ajenas a nuestros cálculos y que no podemos controlar del todo.
La importancia de la ley de Hofstadter en los negocios
En el mundo empresarial, la gestión del tiempo y los recursos es parte esencial de cualquier proyecto. Así que la ley de Hofstadter es una herramienta mental útil para entender por qué tantos planes se descuadran, por qué fallan las previsiones y por qué los equipos acaban trabajando a contrarreloj cuando, en teoría, todo estaba bien organizado.
También te puede interesar: Metodología JIT o Justo A Tiempo, qué es y cómo funciona
La popularidad de la ley de Hofstadter viene de su precisión. Todos hemos vivido proyectos que parecían sencillos y acabaron complicándose. También hemos vivido situaciones en las que el calendario parecía generoso pero terminó resultando muy ajustado.
La sensación tipo “esto debía haber sido más rápido” es tan común que casi forma parte del día a día de cualquier negocio. Entonces, ¿para qué sirve la ley de Hofstadter? Entenderla ayuda a trabajar mejor, a crear estructuras más realistas y a anticipar problemas antes de que se presenten. Por eso muchas empresas la usan como referencia en planificación, gestión de proyectos o incluso en su cultura de trabajo.
Desde MASMOVIL NEGOCIOS esperamos que te haya resultado útil comprender qué es la ley de Hofstadter aplicada a la gestión empresarial. Planifica mejor tus operaciones, teniendo muy en cuenta que siempre surgen fricciones e imprevistos. Con la ley de Hofstadter nunca te quedarás sin tiempo; la clave está en la previsión.